Flotillas de Morena con placas de Nuevo León en CDMX
En un lote de la Alcaldía Álvaro Obregón, en la Ciudad de México, fueron descubiertos al menos 36 vehículos nuevos que portaban distintivos de Morena y tenían placas de Nuevo León. Esta revelación ha generado controversia y cuestionamientos sobre el uso de estos automóviles por parte del partido político.
Vehículos identificados
Durante un recorrido por el lugar, se pudo constatar la presencia de 30 camionetas Nissan Frontier, una Chevrolet Tahoe y cinco autos Nissan V Drive. Todos estos vehículos estaban claramente marcados con el logo de Morena, la frase «Súmate» y un sticker con la cara del presidente Andrés Manuel López Obrador. Estos elementos visuales dejaban en claro la afiliación política de los automóviles.
Valor de la flotilla
Cada una de las camionetas Nissan Frontier tiene un valor de 638 mil pesos, la Chevrolet Tahoe asciende a 1.7 millones, y los autos Nissan V Drive tienen un precio aproximado de 300 mil pesos. Esto significa que el valor total de la flotilla supera los 22 millones de pesos, una cifra significativa que ha llamado la atención de diversos sectores.
Uso de los vehículos
Según testimonios de militantes de Morena en Nuevo León, estos vehículos formarían parte de un programa de afiliación del partido. Se señaló que el partido cuenta con las prerrogativas necesarias para costearlos, dado que es considerada la principal fuerza política en el país. Sin embargo, la procedencia de los fondos y la transparencia en el uso de estos automóviles han generado dudas y críticas por parte de la opinión pública.
En medio de estas revelaciones, la negativa de un guardia de seguridad a proporcionar información sobre los vehículos y la presunta propiedad del terreno por parte de Grupo Surman, una empresa dedicada a la distribución automotriz, han añadido más interrogantes a este polémico caso. La falta de claridad y la opacidad en torno a la adquisición y uso de estos vehículos han generado un debate en torno a la ética y la transparencia en la política mexicana.
Esta situación plantea la necesidad de una mayor rendición de cuentas y transparencia por parte de los partidos políticos en cuanto a sus recursos y el uso de los mismos. La ciudadanía demanda claridad y honestidad en la gestión de los fondos públicos, así como en las prácticas políticas que pueden influir en la vida democrática del país. Es fundamental que se aclaren los detalles de este caso para restaurar la confianza de la ciudadanía en las instituciones políticas.